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La ola libertaria remodeló el mapa político provincial

La Libertad Avanza arrasó en Jujuy con 37,6% y ganó 2 bancas. El peronismo sufre derrota histórica sin representación en el Congreso por primera vez.

El tablero político de Jujuy se reconfiguró por completo en las elecciones legislativas del 26 de octubre de 2025. En un giro drástico que superó todas las proyecciones, La Libertad Avanza (LLA) protagonizó un arrollador triunfo al adjudicarse dos de las tres bancas de diputados nacionales en juego, consolidando a Alfredo González y Bárbara Andreussi como los grandes ganadores de la jornada.

El oficialismo provincial del gobernador Carlos Sadir quedó relegado a un distante segundo lugar, mientras que un peronismo fracturado sufrió una derrota histórica: por primera vez, se queda sin representación por la provincia en el Congreso de la Nación.

El Tsunami Violeta: La contundente victoria de La Libertad Avanza

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El resultado de este domingo fue un auténtico «batacazo» que alteró drásticamente el equilibrio de poder tradicional en la provincia. La victoria de La Libertad Avanza no fue ajustada ni sorpresiva por un margen menor; fue una demostración de fuerza electoral que superó las expectativas más optimistas y dejó en evidencia el desgaste de las estructuras políticas consolidadas. A continuación, se analiza en detalle la escala de un triunfo que redibuja el mapa político jujeño.

Con el escrutinio provisorio prácticamente finalizado, los números confirman la magnitud de la victoria libertaria:

  • Alianza La Libertad Avanza: 37,60 % (149.235 votos)
  • Frente Jujuy Crece: 19,69 % (78.166 votos)
  • Frente Fuerza Patria: 15,53 % (61.654 votos)
  • Frente Primero Jujuy Avanza: 14,97 % (59.423 votos)
  • Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad: 9,92 % (39.387 votos)

La dominancia de LLA fue no solo numérica, sino también territorial. El espacio se impuso en 12 de los 16 departamentos de la provincia, un logro de gran peso simbólico. El golpe más resonante fue la victoria en la capital, San Salvador de Jujuy, un bastión histórico del radicalismo, donde le sacó más de 24 puntos de ventaja al oficialismo provincial, una diferencia que ilustra la profundidad del cambio en el electorado.

La euforia en el búnker libertario fue el reflejo de una victoria que atribuyeron directamente al respaldo del proyecto nacional. El diputado electo, Alfredo González, lo resumió así: «Jujuy habló. Dio un mensaje muy fuerte, un respaldo al proyecto que la mayoría de los argentinos elegimos en 2023 y que necesitaba una reafirmación. Jujuy fue contundente: no quiere volver al pasado ni seguir con la política vieja».

González también destacó el carácter de la campaña, un punto central en el discurso del espacio: «Hemos demostrado que se puede hacer una campaña limpia, a pulmón, con los chicos caminando las calles y llevando el mensaje de la libertad a cada rincón de la provincia».

Su compañera de fórmula, Bárbara Andreussi, fue aún más directa en su dedicatoria, subrayando la figura del presidente como el catalizador del triunfo: «antes que nada agradecer al campeón de la libertad, al presidente Javier Milei. Porque este triunfo, presidente, es suyo. Porque este es un proyecto de país».

Este resultado aplastante no solo instaló a dos nuevas figuras en el Congreso, sino que provocó un efecto dominó que desnudó la crisis de las fuerzas políticas que hasta ahora habían definido la agenda jujeña.

El ocaso de los partidos tradicionales: Análisis de una derrota múltiple

El triunfo de La Libertad Avanza no puede entenderse como un fenómeno aislado. Su ascenso es, en gran medida, la contracara del colapso simultáneo de las estructuras políticas que han dominado Jujuy durante décadas: el radicalismo gobernante y un peronismo fragmentado. La elección del domingo no solo consagró un ganador, sino que certificó la derrota de un modelo de hacer política.

El aparato radical, relegado y sin respuestas

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El oficialismo provincial, agrupado en el frente Jujuy Crece, sufrió una sangría de votos alarmante. Apenas cinco meses antes, en las elecciones provinciales de mayo, habían obtenido un sólido 38,2%. Este domingo, esa cifra se desplomó al 19,7%, quedando 17 puntos por debajo de LLA. Esta caída no es un hecho aislado, sino la aceleración de una sangría de votos que comenzó a manifestarse en las legislativas de 2021, cuando el entonces oficialismo de Gerardo Morales perdió sorpresivamente una banca a manos de la izquierda. Según reportes de la prensa provincial, ni siquiera el despliegue del aparato, que habría incluido viejas prácticas de campaña como la entrega de bolsones y el sorteo de electrodomésticos, pudo contener la ola libertaria.

Pese a la contundente derrota en el primer puesto, lograron su objetivo mínimo: retener la banca que ponían en juego. La ministra de Ambiente, María Inés Zigarán, aseguró su escaño en el Congreso. El gobernador Carlos Sadir reconoció públicamente el resultado con un tono medido: «queremos felicitar a La Libertad Avanza que logrado un triunfo muy importante», mientras destacaba que «nuestro espacio retuvo una banca».

Desde el oficialismo, la lectura apuntó a una elección definida por la polarización nacional. La diputada electa María Inés Zigarán argumentó que «Mucha gente ha votado con ese temor de que se profundice esa crisis económica», y que hubo una «clara nacionalización» de la elección por el temor a «que vuelva el kirchnerismo«.

Peronismo fragmentado: Crónica de una derrota anunciada

 

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Si la derrota del radicalismo fue dura, la del peronismo fue catastrófica. La división entre el Frente Fuerza Patria, liderado por la camporista Leila Chaher, y el Frente Primero Jujuy Avanza, referenciado en el dirigente Rubén Rivarola, fue la causa directa de un fracaso electoral histórico.

La división no solo les impidió competir, sino que les costó la banca que defendía Chaher, dejando al peronismo jujeño sin representación en el Congreso por primera vez en su historia. La matemática es elocuente: sumados, ambos frentes habrían superado el 30% de los votos, posicionándose cómodamente en el segundo lugar y disputando una de las bancas.

La fractura interna se tradujo en un cruce de acusaciones que expuso la profundidad de la crisis. Leila Chaher apuntó directamente contra sus rivales internos:«a quienes salieron cuartos que festejaron, sin duda se cumple lo que decíamos desde el primer día: Trabajaron en nombre del oficialismo de la provincia para garantizarle la banca a Jujuy Crece».

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Desde la otra vereda, Rubén Rivarola devolvió la responsabilidad a la conducción nacional del kirchnerismo: «Nosotros no hicimos mal nada. Los que hacen mal son los que vienen desde Buenos Aires, desde La Cámpora, queriendo imponer a su candidato. Si hubiéramos estado juntos, la historia sería otra».

La izquierda pierde su escaño en el Congreso

Alejandro Vilca La ola libertaria remodeló el mapa político provincial 7212

El Frente de Izquierda (FIT), que había logrado un hito en 2021 con la elección de Alejandro Vilca, no pudo repetir la hazaña, como todo gato negro siempre cae parado, este toma su escaño en la Legislatura Provincial obtenido en mayo. A pesar de obtener un meritorio 9,92% de los votos, no fue suficiente para retener la banca, perdiendo un espacio clave de representación nacional y quedando fuera de la nueva composición del Congreso por Jujuy.

El resultado final, por tanto, no fue solo el triunfo de una nueva fuerza, sino una reorganización completa del poder, cuyas causas subyacentes explican la magnitud del cambio.

Las claves del voto jujeño: Entre el apoyo Nacional y la innovación electoral

Javier Milei elecciones 2025 La LIbertad Avanza LLA

¿Qué factores explican este vuelco electoral tan profundo? ¿Qué dinámicas definieron una jornada que pasará a la historia política de la provincia? El resultado del 26 de octubre fue producto de una confluencia de elementos que van desde la influencia de la agenda nacional hasta innovaciones en el propio sistema de votación.

El efecto Milei y la nacionalización de la agenda

El factor determinante del triunfo de La Libertad Avanza en Jujuy fue el contundente respaldo a la figura del presidente Javier Milei y su proyecto nacional. El electorado jujeño votó en clave nacional, interpretando estos comicios como una ratificación del rumbo iniciado en 2023. La victoria local se enmarca en un fenómeno más amplio: LLA se impuso en 16 provincias, consolidándose como la principal fuerza política del país y demostrando que su influencia trasciende las fronteras de los grandes centros urbanos.

El debut exitoso de la Boleta Única de Papel

Uno de los aspectos más destacados y elogiados de la jornada fue la primera implementación de la Boleta Única de Papel (BUP) en una elección nacional en la provincia. El nuevo sistema fue percibido de manera abrumadoramente positiva tanto por los votantes como por los dirigentes, quienes destacaron su agilidad y transparencia. La opinión fue casi unánime, como reflejan las palabras del diputado Manuel Quintar: «la boleta única de papel creo que es un beneficio para todos los argentinos los jujeños Eh me parece que es el camino a seguir».

En la misma línea, el senador Ezequiel Atauche afirmó: «Es un es un sistema mucho más transparente más moderno que que ayuda al ciudadano a elegir rápido».

El voto joven como motor del cambio

La campaña y la victoria de La Libertad Avanza tuvieron un protagonista claro: la juventud. El discurso de ruptura con la «política vieja» caló hondo en un sector del electorado que se movilizó para fiscalizar y difundir las ideas libertarias. Los propios candidatos electos reconocieron este rol fundamental. Alfredo González se mostró visiblemente agradecido: «es increíble lo que han hecho los chicos».

Bárbara Andreussi profundizó en el análisis, señalando que el cambio generacional fue clave para entender el resultado: «los jóvenes han abierto los ojos, dándose cuenta de que los políticos tradicionales no ofrecían soluciones».

Estos tres elementos —el respaldo a Milei, la eficacia de la BUP y el impulso de la juventud— conformaron una «tormenta perfecta» que no solo explicó el resultado, sino que sentó las bases para un nuevo ciclo político en Jujuy.

El nuevo Congreso y los desafíos futuros

El impacto de las elecciones del 26 de octubre trasciende el resultado inmediato. Las consecuencias se sentirán tanto en la conformación del poder a nivel nacional como en el reacomodamiento de fuerzas en Jujuy, con la mira puesta en las elecciones ejecutivas de 2027.

La nueva composición de la representación jujeña

Con el recambio legislativo, la delegación de diputados nacionales por la provincia cambia radicalmente su color político. Tres legisladores finalizan su mandato y tres nuevos asumen, reflejando el veredicto de las urnas.

Diputados que Dejan su BancaDiputados que Ingresan al Congreso
Natalia Sarapura (UCR)Alfredo González (LLA)
Leila Chaher (PJ/Fuerza Patria)Bárbara Andreussi (LLA)
Alejandro Vilca (FIT)María Inés Zigarán (Jujuy Crece/UCR)

Implicancias a nivel nacional: Un gobierno fortalecido

El resultado en Jujuy y en las otras 15 provincias donde ganó LLA fortalece significativamente al gobierno de Javier Milei en el Congreso Nacional. El oficialismo verá crecer su bloque en la Cámara de Diputados a 83 bancas, y junto a aliados clave como el PRO (24 bancas), consolidará una fuerza parlamentaria de más de 100 legisladores. En el Senado, pasará de tener 8 a 20 escaños. Esta nueva composición, superando el tercio en la Cámara Baja, le otorga al gobierno el músculo político necesario para impulsar reformas estructurales clave —como la laboral, tributaria y previsional— y, fundamentalmente, para bloquear cualquier intento de juicio político que pudiera impulsar la oposición.

El escenario local post-elección: Reinvención o crisis

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A nivel provincial, el resultado deja a las fuerzas tradicionales en una encrucijada. Para el radicalismo gobernante de Carlos Sadir, la derrota es un llamado de atención que exige una profunda «reinvención» si quiere evitar la pérdida del poder en 2027. La rápida erosión de su capital político obliga a una autocrítica y a la búsqueda de nuevas estrategias para reconectar con un electorado que ha demostrado ser más volátil de lo que pensaban.

Para el peronismo, el desafío es aún mayor. La fractura interna no solo le costó una derrota, sino su propia presencia en el debate nacional. La encrucijada es clara: o resuelve sus divisiones a través de un proceso de unidad y renovación real, o corre el riesgo de volverse irrelevante como alternativa de gobierno.

La elección de 2025 ha cerrado un ciclo en la política jujeña. El voto ciudadano, crítico e independiente, ha abierto una nueva etapa de incertidumbre y desafíos, donde nada parece estar escrito.

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