La provincia de Jujuy ha sido testigo de importantes cambios en su panorama político reciente, especialmente con la llegada de Carlos Sadir al gobierno y la continuidad de Raúl Jorge como intendente de San Salvador de Jujuy. Ambos líderes, con trayectorias contrastantes, enfrentan desafíos en cuanto a su popularidad y gestión. Este artículo analiza de manera cronológica los eventos clave en sus mandatos y cómo han impactado en la percepción pública.
Carlos Sadir: Ascenso y desafíos como Gobernador
El gobernador Carlos Sadir asumió el cargo en diciembre de 2023, sucediendo a Gerardo Morales, un referente en la política nacional y provincial. La victoria de Sadir fue vista como una continuidad del liderazgo de Morales, quien había impulsado un modelo de desarrollo y orden en Jujuy, con particular atención en el sector energético y la infraestructura.
Al inicio de su mandato, Sadir gozaba de una imagen positiva del 56,2%, beneficiado por lo que comúnmente se llama la “luna de miel política”, un período donde los nuevos gobernantes suelen disfrutar de altas tasas de popularidad debido a las expectativas generadas durante la campaña electoral.
Sin embargo, esta alta imagen positiva no se mantuvo por mucho tiempo. A lo largo de la primera mitad de 2024, Sadir enfrentó varios desafíos que deterioraron su imagen pública, destacando la compleja situación económica que afectaba a todo el país. La inflación y los ajustes en políticas sociales fueron algunos de los factores que afectaron su gestión.
En julio de 2024, la imagen positiva del gobernador había caído hasta el 50%, mientras que su imagen negativa aumentó a un 47,2%. Esta tendencia negativa reflejaba el creciente malestar de los jujeños, en gran medida impulsado por el impacto de medidas económicas que, aunque necesarias, no fueron bien recibidas.
A pesar de este retroceso, la recuperación de Sadir comenzó a evidenciarse en los últimos meses del año. Según la encuesta de octubre de 2024 de CB Consultora, la imagen positiva del gobernador se elevó nuevamente al 51%, mostrando un ligero repunte. De igual manera, su imagen negativa bajó al 44,7%, lo que indicaba que, aunque aún enfrentaba desafíos importantes, el descontento estaba comenzando a ceder.
El camino de Sadir ha estado marcado por un manejo prudente pero arriesgado de la situación económica y social de Jujuy. Su recuperación en las encuestas coincide con la implementación de medidas que buscaban aliviar el malestar popular y estabilizar la provincia en medio de un panorama nacional incierto.
Raúl Jorge: Desgaste de un líder de larga data
En contraste con el relativamente reciente ascenso de Sadir, Raúl Jorge, quien ha sido una figura clave en la política de San Salvador de Jujuy durante más de dos décadas, enfrenta un desgaste notable en su imagen. Jorge ha sido intendente de la capital provincial durante cinco mandatos consecutivos, un hecho que, si bien le ha otorgado estabilidad y reconocimiento, también ha generado un cansancio palpable entre los electores.
En diciembre de 2023, cuando asumió su quinto mandato, Jorge contaba con una imagen positiva del 50%, lo que para muchos podría haber sido un indicio de fortaleza. Sin embargo, los primeros meses de su nueva gestión no fueron tan exitosos. En julio de 2024, su imagen positiva cayó al 43,2%, una baja significativa que reflejaba un creciente malestar entre los ciudadanos.
Esta tendencia negativa continuó en octubre de 2024, cuando la imagen positiva del intendente se desplomó aún más, llegando al 39,3%. En menos de un año, Jorge perdió más del 10% de apoyo entre los jujeños, lo que plantea serios interrogantes sobre su capacidad para revertir la situación en los años siguientes.
Aun más preocupante para Jorge fue el aumento de su imagen negativa, que pasó del 46,9% en diciembre de 2023 al 58,4% en octubre de 2024. Este fuerte incremento en el rechazo ciudadano puede explicarse, en parte, por la percepción de inacción o decisiones impopulares en áreas clave como la infraestructura urbana y la seguridad.
Factores externos e internos en las caídas y recuperaciones
Ambos líderes, Sadir y Jorge, han experimentado variaciones en su popularidad debido a factores internos y externos a sus gestiones. En el caso de Sadir, los problemas económicos nacionales, sumados a la alta inflación y los ajustes en el gasto público, han afectado la percepción de su gobierno. No obstante, su capacidad para adaptarse y tomar medidas correctivas ha permitido que su popularidad comience a repuntar hacia finales de 2024.
Por otro lado, Jorge enfrenta un problema más estructural: el desgaste natural que genera el estar en el poder por tanto tiempo. A pesar de haber sido un líder clave en el desarrollo de San Salvador de Jujuy, su larga permanencia en el cargo ha generado una sensación de estancamiento en una parte de la población, que exige cambios más radicales y una renovación en el liderazgo.
El papel de Gerardo Morales en la Política de Jujuy
Es imposible entender el escenario político de Jujuy sin hacer referencia a Gerardo Morales, el exgobernador que sigue siendo una figura de gran relevancia en la provincia. Morales fue el principal arquitecto del actual esquema político jujeño y ha sido un mentor para Sadir, su sucesor. Aunque ya no ostenta un cargo formal en el gobierno provincial, su influencia sigue siendo importante.
Bajo su mandato, Jujuy experimentó cambios estructurales, especialmente en el ámbito de la energía, con proyectos de energía solar que posicionaron a la provincia como líder en este sector en Argentina. Además, Morales fue un firme defensor de la disciplina fiscal y el orden, políticas que Sadir ha continuado, aunque con ciertos ajustes para enfrentar las nuevas realidades económicas del país.
La sombra de Morales también afecta a Raúl Jorge. Durante años, Morales y Jorge trabajaron de la mano, pero a medida que el desgaste de este último se hizo más evidente, algunos analistas sugieren que Morales podría estar buscando nuevas caras para renovar el liderazgo en la capital provincial.
Perspectivas Futuras: Desafíos y Oportunidades para Sadir y Jorge
El futuro político de Jujuy estará marcado por la capacidad de sus líderes para responder a los desafíos inmediatos. Carlos Sadir ha mostrado una capacidad de recuperación en su popularidad, pero deberá mantener una estrategia clara para consolidar ese repunte y enfrentar los retos que aún persisten en la provincia.
Por su parte, Raúl Jorge enfrenta una tarea más complicada. Después de cinco mandatos, el margen de maniobra para reinventarse es limitado, y el creciente malestar entre los ciudadanos indica que podría ser el momento de una renovación más profunda en el liderazgo de la capital jujeña.
En cuanto a la influencia de Gerardo Morales, su rol como un referente en la política de Jujuy continuará siendo clave. Morales podría jugar un papel importante en las elecciones futuras, ya sea impulsando nuevos líderes o incluso regresando a la escena política de manera más directa.
Conclusión
La política en Jujuy se encuentra en un punto de inflexión. Mientras que Carlos Sadir ha comenzado a recuperarse de un descenso en su popularidad, Raúl Jorge enfrenta un desgaste significativo después de tantos años en el poder.
El legado de Gerardo Morales sigue influyendo en la provincia, y su capacidad para moldear el futuro político será crucial en los próximos años. Para ambos líderes, el desafío está en adaptar sus gestiones a las expectativas cambiantes de una población que busca tanto estabilidad como renovación.
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