En la cadena nacional luego de un encuentro con los 24 gobernadores, se mostraron muy preocupados por el impacto de la segunda ola. Pidió no viajar al exterior y reconoció la escasez de vacunas.
Alberto Fernández recomendó a los argentinos que no viajen al exterior por el riesgo de contagio de las nuevas cepas de coronavirus, en una cadena nacional en la que reconoció que apenas llegaron al país el 6% de las más de 60 millones de dosis que compró el Estado.
El mensaje del Presidente se dio luego de un encuentro virtual con los 24 gobernadores, muy preocupados por el impacto de la segunda ola, que como pasó en los países del hemisferio norte, prevén incluso más dura que la primera. Aunque ahora la nueva onda de contagios convivirá con el avance del plan de vacunación en una carrera contra reloj por atenuar su mortalidad.
Este viernes los ministros de Salud de todo el país se reunieron en el Cofesa, alarmados por la lentitud de la nueva ministra Carla Vizzotti, en armar un plan para contener la segunda ola. Con funcionarios nuevos que recién empiezan a familiarizarse con el cargo, empezando por la propia ministra que estuvo aislada por Covid a poco de asumir, la cartera de Salud de Nación todavía no logró reponerse a la traumática salida de Ginés (González García), hoy vista por el peronismo como un error estratégico de Alberto.
En la anterior reunión de Vizzotti con los ministros de Salud de las provincias, que se extendió por más de tres horas, sorprendió la falta de propuestas articuladas para enfrentar la segunda ola y la reiteración de preceptos ya conocidos por todos, como el lavado de manos.
Los sistemas de todo el país enfrentan la suba de casos que ya empieza a registrarse, preocupados por el cansancio del personal de salud, la escasez de vacunas, la suba de precios de los insumos críticos y un sistema de salud privado muy debilitado por el freno que el propio Gobierno le puso a los ajustes de cuotas. Frente a este panorama ven a Vizzotti sin el volumen político y la capacidad de liderazgo de Ginés.
“La pandemia no terminó. Debemos extremar los recaudos para que el Covid-19 no nos vuelva a aislar”, advirtió Alberto en el inicio de su mensaje grabado de 12 minutos, que contuvo más diagnóstico y acaso advertencia de lo que viene, que anuncios concretos.
Fernández dijo que “las nuevas variantes del virus hacen riesgoso” salir del país, remarcó que “está totalmente desaconsejado viajar al exterior” y sostuvo quienes lo hagan “al regresar deberán aislarse y someterse a controles estrictos”. Advirtió que “las fronteras continuarán cerradas para turistas extranjeros, como lo están desde el 24 de diciembre” y subrayó que las nuevas cepas son “mas contagiosas y letales”. En particular preocupa la cercanía de cepa P1 de Manaos, una de las más letales y contagiosas que ya puso a todo el sistema de salud de Brasil contra las cuerdas.
“Para prevenir y reducir todo lo posible el impacto de la segunda ola, les pido que todos y todas respetemos las principales medidas de prevención”, señaló y enumeró los dos metros de distancia entre personas, el uso adecuado del barbijo, la higiene de manos, mantener los ambientes ventilados y realizar actividades al aire libre.
“Donde no hay cuidado colectivo, cualquier sistema de salud puede desbordar”, agregó explicó que la Argentina enfrenta “tres problemas muy importantes”. El primero “es que en muchos países, con la llegada del otoño, o incluso antes, se inició una segunda ola, en muchos casos con niveles de contagios y fallecimientos muy elevados”.
Solo 18 países han recibido el 88% de las vacunas que se han distribuido hasta ahora y de ellos sólo 15 países han recibido más del 10% de las vacunas que compraron. El resto de los países está en un gran desierto con pocas vacunas o sin ningún acceso a ellas.
El segundo problema “es que el Covid ha tenido mutaciones y nuevas variantes, algunas de las cuales son mucho más contagiosas y con severa letalidad” y el tercero “es que hay escasez global de vacunas”.
El Presidente informó que “solo 18 países han recibido el 88% de las vacunas que se han distribuido hasta ahora”, y remarcó que “la gran mayoría de los países está en un gran desierto, con pocas vacunas o sin ningún acceso a ellas”.
Además indicó que “hay un retraso global en la entrega de vacunas y hay problemas de producción, logísticos, de insumos, ante una complejidad absolutamente excepcional. Hemos firmado contratos para adquirir más de 65 millones de dosis y seguiremos firmando nuevos contratos, pero recibimos poco más de 6 por ciento de ellas”.
Fernández contó que cada país “firma contratos para la compra de vacunas” y explicó que “solo 15 países recibieron hasta ahora más del 10% de las vacunas que compraron”.
Luego dedicó un tramo de su discurso para repasar lo que hizo su gobierno durante la primera ola. “El año pasado nos cuidamos para ganar tiempo para fortalecer el sistema de salud, supimos conseguir un incremento de 47% de las camas de terapia intensiva, incorporamos 3.300 respiradores, hicimos 12 hospitales modulares”, reseñó, y agregó que “fue por ese tiempo y ese trabajo colectivo que no saturó el sistema de salud” y por eso “cada persona que lo necesitó pudo acceder a la atención sanitaria”.
“Este año tenemos que cuidarnos mientras avanza el plan de vacunación más grande de nuestra historia”, aunque admitió que las vacunas “lamentablemente están demorando más tiempo en llegar”.
“Nuestros proveedores han tenido dificultades para escalar la producción y no han podido entregar en el tiempo que habían previsto y la verdad es que incluso los países más ricos han tenido negociaciones y tensiones con los proveedores”, completó.
Y recordó que hasta ahora llegaron al país cuatro millones de dosis y cerca de tres millones de dosis se han aplicado. “La semana pasada se vacunaron 723 mil personas en el país, 100 mil personas por día”, reveló y remarcó que la Argentina “tiene la capacidad de vacunar cuatro millones y medio de personas por mes”, pero aún no se cuenta con las “dosis suficientes” para alcanzar ese ritmo. (LPO)
