Casi dos años, ese es el tiempo que Nicolás Casares lleva sin ver a su hija. Distintas irregularidades hacen sospechar a la familia que el diputado nacional interfiere en el derecho del hombre a encontrarse con la nena.
Hace 18 meses que un padre no puede ver a su hija: un año y medio. En este marco, María Julia Casares, hermana del damnificado, Nicolás Casares, y tía de la pequeña, asegura que la madre de la nena, Mariana Bouhid, impide la relación y para lograrlo cuenta con la ayuda de su padre, el diputado nacional por el Frente Cambia Jujuy, Gustavo Bacha Bouhid.
La angustia es mucha y exponer públicamente el caso se volvió necesario para María. “No podemos ver a mi sobrina desde hace 18 meses, mi hermano tampoco. La causa vive cajoneada y manoseada”, aseguró la mujer, en diálogo con el portal RealPolitik.
El caso es complejo: los jueces renuncian a la causa, van pasando los meses y siempre vuelve a cero. No existe ningún impedimento legal para que Nicolás vea a la nena, hace meses que tiene sentencia firme para que el reencuentro pueda darse, pero nunca consigue concretarlo.
Bouhid, actual diputado nacional por Jujuy, es quien María y su familia creen que llamó a la última nueva jueza, Marta Ángela Rosenbluth, para que suspendiera la citación que emitió la semana pasada con el objetivo de que Casares vea a su hija: a último momento todo cambió y el encuentro no tuvo lugar.
“Creo que nadie con un poco de formación puede pensar que una niña tan pequeña no va a saber temprano o tarde la verdad de todo y se le dará vuelta la torta y terminará odiando a su madre por haberle quitado el derecho de disfrutar de su padre”, sostuvo María en diálogo con este medio, para luego advertir sobre el “terrible e irreversible daño psicológico ocasionado” a la menor. (RealPolitik)
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